La NFL dio a conocer desde noviembre del año pasado que The Weeknd sería el encargado del show del medio tiempo de uno de los espectáculos deportivos más importantes que se realizan año con año, Super Bowl.
La intriga generada por el espectador era enorme, ya que no se sabía si el artista interpretaría sus éxitos colaborativos con artistas como Daft Punk, La Rosalía o incluso con Maluma por el remix de “Hawai”. Sin embargo, para sorpresa de todos, no fue así.
La expectativa crecía conforme los astros se alineaban para que fuera un show inolvidable, ya pactado el encuentro entre el ganador de 6 anillos de Super Bowl, Tom Brady y la nueva promesa de la siguiente década, Patrick Mahomes, el espectáculo estaba garantizado.
La mesa estaba servida y lo único que hacía falta era corear y bailar al son que el músico canadiense impusiera.
La presentación del Pepsi Super Bowl LV Halftime Show comenzó con uno de los éxitos lanzados en el ya lejano 2016 “Starboy”, posteriormente el Raymond James Stadium bailó al ritmo del segundo sencillo de “Beauty Behind the Madness”, “The Hills”.
En el show que duró 16 minutos aproximadamente, también escucharon éxitos como “Can't Feel My Face”, “I Feel It Coming”, “Save Your Tears” y “Earned It” este último éxito que forma parte del soundtrack de la película Cincuenta Sombras de Grey.
El tema musical que no podía faltar “Blinding Lights”, rodeado por decenas de bailarines que portaban cubrebocas.
Para la presentación del cantante nacido en Toronto, aportó 7 millones de dólares para el montaje del espectáculo.
Acompañado de un cielo iluminado de fuegos artificiales fue como The Weeknd cerró el show de medio tiempo en el cual a la postre los Bucaneros de Tampa Bay, de la mano de Tom Brady levantaron el tan ansiado trofeo Vince Lombardi.
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